Esta película pudo verse en la Sección Oficial a Concurso del II Festival de Sevilla, Cine y Deporte.El cine iraní está, afortunadamente, abriéndose camino en el mundo Occidental; es una cinematografía que, aunque todavía maniatada por los rígidos corsés del fundamentalismo islámico, consigue expresar sus evidentes deseos de libertad; como suele ocurrir en países con déficits democráticos, como es el caso de la moderna Persia, donde un régimen teóricamente parlamentario está, sin embargo, fortísimamente condicionado por un dogma religioso y un carácter teocrático, las ansias de expresión libre encuentran un cauce excelente en el cine. Así hemos podido ver durante la pasada década mucho y buen cine, sobre todo de autores como Abbas Kiarostami, el maestro de toda su generación e introductor del cine iraní en Occidente, con títulos espléndidos como A través de los olivos y El viento nos llevará, y en menor medida con Jafar Panahi, con títulos como El globo blanco y El espejo.
The day I became a woman nos presenta tres historias (no concatenadas, aunque hay elementos secundarios de unas en otras) en torno a las dificultades de las iraníes para desarrollar una vida normal, desde la niña que, al cumplir los nueve años, tendrá que dejar de jugar con su amigo, porque “ya es una mujer” (o sea, que los clérigos musulmanes tampoco tienen ni idea de fisiología femenina...), pasando por la ciclista que se divorcia de su marido porque éste le impide montar en bicicleta, hasta la vieja que antes de morir se gasta su dinero en las comodidades que no pudo disfrutar en vida. El cine de la directora Marzieh Makhmalbak (que firmaba sus primeras películas, como ésta, con su apellido de soltera, Meshkini) está temáticamente muy influido por la postergación de su sexo en Irán, y en ese sentido el segundo segmento es notablemente combativo, una microhistoria que de puro repetitiva (como ocurre con el cine de Kiarostami) resulta ser extrañamente lírica: ese grupo de mujeres enlutadas, esos chadores rodantes cubriendo a las ciclistas que se afanan en pedalear, pedalear, pedalear, y tras ellas cada vez más hombres a caballo, en una metáfora quizá obvia pero no por ello menos atractiva.
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Género
Nacionalidad
Duración
78'
Año de producción
The day I became a woman -
by Enrique Colmena,
Nov 29, 2011
Chadores rodantes
2 /
5 stars